Para intentar hablar del financiamiento de los municipios, y de los municipios turísticos, tenemos que analizar anteriormente la problemática que representa una mala financiación en un municipio:

Un sistema financiero eficiente es aquel capaz de captar ahorro en condiciones adecuadas de remuneración, liquidez y seguridad, con objeto de prestar a los demandantes de fondos los recursos así obtenidos en razonables condiciones de precio, cantidad y plazo. Un Sistema Financiero comprende a los agentes que intervienen en él (prestamistas e intermediarios financieros), los mercados en los cuales se intercambia activos financieros y se fijan precios y la legislación e Instituciones que regulan su funcionamiento.

La función principal del Sistema Financiero es pues la de garantizar una asignación eficaz de los recursos financieros, con independencia del volumen de fondos comprometidos, su naturaleza, plazos y costes. Diferenciamos básicamente dos sub-sistemas dentro del Estado Español, sin contar Canarias la cual cuenta con peculiaridades diferentes en este ámbito, el primer sistema es el foral, que se aplica tanto al País Vasco como en Navarra, y el segundo es el sistema común, aplicado al resto de Comunidades Autónomas. El sistema foral, aplicado en los territorios forales (Provincias y no territorios), se encargan de recaudar todos los impuestos, a excepción de los contribuyentes a la Segureta social y más tarde pagan a la Sido una cuota por los servicios que presta en las áreas no transferidas.

El sistema excluye pues a los territorios forales de participar en la redistribución territorial, dónde el Estado reparte el dinero que ha recaudado de las comunidades con regimos común basándose en un criterio según una fórmula de necesidades de gast, que asigna a cada comunidad una cantidad de recursos en función de sus características demográficas y territoriales (La población, el grado de envejecimiento, la superficie, la dispersión...) el trasfondo de esta formula es el de una filosofía de nivelación total. La idea es que independientemente del nivel de renta de cada región, todos los gobiernos regionales deben tener los recursos necesarios para poder prestar servicios parecidos a sus ciudadanos. El problema radica en una serie de inconvenientes en el sistema, las modulaciones, las garantías de mínimos, los fondos especiales, las peculiaridades canarias y la denominada recaudación normativa por los tres impuestos cedidos) que hacen que al final el que llega a muchas comunidades no sea el mismo que el pactado sobre el papel.

Además de la problemàtica que crean estos diferentes sistemas de financiamiento, existe el problema de los municipios turísticos. Estos ven como la población augmenta según la época del año, y en consecuencia augmenta también la demanda de servicios y con ella la necesidad de gasto pero, hasta ahora, el sistema de financiación local, generalmente insuficiente, no a previsto instrumentos para compensar económicamente  la orientación turística de estos municipios.  Por lo tanto se genera un desequilibrio que puede derivar en un déficit crónico o bien en una su provisión de servicios públicos, ya sea, en cantidad o calidad, y en la perdida de competitividad de una determinada oferta turística.

Los municipios turísticos tienen unos gastos que los municipios que no dependen del turismo no tienen, estos son gastos referentes a la promoción e información turística, mantenimiento de playas y atractivos turísticos, mantenimiento urbano de urbanizaciones, zonas verdes, seguridad, infraestructuras de transporte, gestión de todos los ciclos de los recursos: agua, energía, residuos… actuaciones para la formación y profesionalización del personal... todos estos gastos no se ven reflejados en la financiación que reciben este tipos de municipios, y hay que encontrar una solución rápida a este problema,  ya sea a través de transferencias del Estado y Comunidades Autónomas, o de mayores niveles de tributación a los no residentes, origen de ese mayor gasto.

Los municipios se finanzan básicamente de estas formas:

1)Por medio de la ley de coparticipaciòn municipal que debe darse cada provincia.

2)Por lo que recaude por tasas (algunos municipios hablan de impuestos, lo que no es tecnicamente correcto.)

3) Donaciones y subsidios

4) ATN que pueda enviarle el PEN. (Apoyo del tesoro nacional) que al igual que los ATP son subsidios y tambien dinero proveniente de prestamos a devolver en cuotas muy accesibles sin interés.

Objetivo general para esa suficiencia financiera, para ocupar el lugar que la Constitución otorga a los municipios y que los ciudadanos exigen en forma de servicios públicos debería ser alcanzar a corto plazo los siguientes o similares porcentajes del gasto público en cada uno de los niveles

Administración Central 37,5 %, Autonómica 37,5 % y Local 25 %. Negociación de un nuevo Pacto Financiero de Estado con participación conjunta de la Administración Central, Autonómica y Local para la nueva configuración de competencias y recursos financieros asociados. cesta de impuestos entre los tres niveles Central, Autonómico y Local, no a la atribución exclusiva de impuestos a un solo nivel:

IRPF: Participación adicional de los municipios en el 15 % de los ingresos por IRPF que aumentaría la Participación de los Ingresos del Estado (PIE).

IVA: Participación adicional de los municipios en el 10% de los ingresos por IVA. Impuesto de Gasolina: Participación adicional de los municipios en el impuesto al mismo nivel que la administración central.

Tasas sobre el espacio radioeléctrico y nueva economía: Participación adicional de los municipios en un 25% del importe total.

Impuestos sobre la energía actual o potencialmente creados en el futuro: Participación adicional de las entidades locales en un 25% del importe total.

IVA soportado por los ayuntamientos o al menos aplicación de tipos reducidos (3 %). IAE a los ayuntamientos en sus actuales niveles y en su previsible evolución sin que las exenciones signifiquen disminución alguna de sus ingresos.

 Impuesto sobre Circulación de Vehículos y Tracción Mecánica, asunción de su gestión por parte de las Comunidades Autónomas con compensación equivalente y proporcional a cada Ayuntamiento de los ingresos. IBI y a su gestión de mayor carácter municipal. La Administración Central debiera únicamente establecer unos intervalos de valores sobre la base de los cuales los municipios debieran establecer y gestionar, tanto los valores catastrales como los tipos impositivos, posibilitando tipos diferenciados de gravamen en función del destino del inmueble. Consejo de Política Fiscal y Financiera Constitución en todas las autonomías de Comisiones Autonómicas de colaboración interadministrativa integradas por Administración Central, autonómica y local, a efectos de la redistribución de competencias y recursos financieros.

 Se entiende que esta figura es elemento esencial para la negociación del nuevo Pacto Local a nivel estatal y a nivel autonómico. Participaciones de Ingresos Autonómicos (PICA) con dotación del 10% de los ingresos autonómicos con finalidad municipal como transferencias corrientes no finalistas, con criterios de reparto de nivelación de servicios. PIE y PICA las peculiaridades de los municipios y en especial de los municipios turísticos que deben atender y prestar servicios a una población flotante o asistida importante. tasas medioambientales de ámbito municipal en todo el ciclo de los recursos: agua, residuos, energía... o con finalidad medioambiental y destino municipal en razón del territorio (Ecotasa Turística por ejemplo) "apalancamiento fiscal" en aquellos municipios cuya configuración lo permita o sea recomendable.

 • Creación en todas las autonomías de Participaciones de Ingresos Autonómicos (PICA) con dotación del 10% de los ingresos autonómicos con finalidad municipal como transferencias corrientes no finalistas, con criterios de reparto de nivelación de servicios.

• Tener presente en las fórmulas de reparto de PIE y PICA las peculiaridades de los municipios y en especial de los municipios turísticos que deben atender y prestar servicios a una población flotante o asistida importante.

• Rechazo frontal a la asunción real y efectiva de competencias de otros niveles del Estado sin la correspondiente transferencia financiera.

• Potenciación de los impuestos y tasas medioambientales de ámbito municipal en todo el ciclo de los recursos: agua, residuos, energía... o con finalidad medioambiental y destino municipal en razón del territorio (Ecotasa Turística por ejemplo)

• Potenciación del “apalancamiento fiscal” en aquellos municipios cuya configuración lo permita o sea recomendable.

• La posible creación de una ecotasa municipal para los no residentes como impuesto potestativo, puede ser la respuesta a la necesidad financiera de una calidad sostenible de las zonas turísticas.